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26 de junio de 2011

KIME, transmisión de la energía al punto de contacto


Sobre (kime), transmisión de la energía al punto de contacto

Mediante el movimiento (golpe-defensa) transmitimos energía- vibración. Para que esta se transmita al objetivo necesitamos desbloquear todo el recorrido desde su punto de inicio… músculos… articulaciones… y contacto.

Cualquier bloqueo, antes, durante el movimiento y en exceso en el momento del contacto, evitaría el fluir natural del ki.

Toda esta energía debe ser “transmitida” al objetivo con la idea de que no solamente contacte si no que afecte más allá del punto de contacto.

Forma de entender el cuerpo y su estado natural

Entendiendo que pretendemos transmitir la energía mediante vibración, hay que tener en cuenta que:
Cuando un cuerpo sólido golpea otro sólido sufre un efecto de rebote hacia sí mismo con vibración.
Un cuerpo natural, sin contracción, cuando golpea a un sólido, hace vibrar y tambalear la estructura de éste, afectando a todo su conjunto.
Un cuerpo natural, sin contracción, cuando golpea a otro cuerpo en igual estado, puede transmitir a ese cuerpo la vibración que sale de sí. Afectando a más allá del punto de contacto.

Ejecución del movimiento

Correcta localización del centro de gravedad.
Una correcta respiración, abdominal y sin contracción nos conecta con nuestro centro de energía “hara”. Desbloquear las rodillas a un estado natural nos posibilita bajar nuestro centro de gravedad a nivel de las caderas “hara” y nos conecta con la base de los pies y la tierra. Mantener tensiones en hombros nos impediría esta localización.

Una vez localizado el centro de gravedad a nivel de nuestra cintura, conscientes de esta sensación y de la energía que acumulamos en el “hara”… comienza el movimiento.

La sensación parte desde este centro “hara”, y se transmite en forma de movimiento y vibración a través de huesos-músculos y articulaciones hasta el objetivo. Esta transmisión es posible gracias a la correcta tensión muscular y el desbloqueo articular (¿Cuál es la correcta tensión muscular?, entiendo que exclusivamente la necesaria para soportar el movimiento).

En el momento del contacto transmitimos peso, vibración - energía, concentrando la sensación en una zona mínima de nuestro cuerpo que contacta (kime). Si en el momento de este llegar acumulamos tensiones o bloqueos articulares, el contacto no será absorbido en el objetivo si no que retornará hacia nosotros a través de nuestros músculos y articulaciones.

En el momento del contacto debe haber un correcto soporte óseo, conexión del mismo con las inercias del movimiento y dirección de las caderas (centro). Más aun, si existe cualquier tensión o bloqueo, cortará el movimiento y la transmisión de nuestra sensación y el “ki”, vibración quedará bloqueada en alguna articulación y retenida en nuestros músculos. Todo lo que quede en nosotros no será transmitido.

Más allá del contacto, más allá del movimiento.

Todo movimiento es vibración
El movimiento parte de una intención
La intención va cargada de sensaciones
La práctica consiste en como reunir estos conceptos:
Intención… sensación… vibración… para transmitir “ki”

Cualquier práctica lleva consigo intenciones, sensaciones, y energía.
En el arte del karate, cuando intentas pegar, golpear, romper, o palabras similares. Cuando el movimiento parte de estas intenciones, el resultado llegará cargado de bloqueos y tensiones físicas y psíquicas.

En mi práctica la palabra clave es “transmitir”, no hay intento de pegar, golpear, fuerte, romper, etc. Cuando transmites, entonces vuelcas, vacías, das todo (bueno o malo), no retienes.

Todo depende de la intención que genera el movimiento… las sensaciones que ha generado la intención… y como permitimos que llegue al objetivo transformándola en energía física ”vibración”… que esta vibración pueda ser en forma de energía de paz o afecte en forma de jutsu… es lo que convierte nuestra práctica en Do.

Esta es mi práctica, y me gustaría compartirla.

José Cáceres.
Gracias

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