KATA significa forma. Es un conjunto de movimientos preestablecidos que simulan un combate imaginario del practicante contra una serie de agresores.
El kata comienza y termina con un saludo.
La mejor descripción de lo que es un kata nos la da el maestro Shigeru Egami:
¿Quieres leer más?“Los movimientos desde hachiji dachi, desde el principio hasta el final, deben ser elásticos y continuos, su consecución debe ser hermosa y rítmica y el ejecutor debe irradiar vitalidad y fuerza. Cuerpo y espíritu deben ser una entidad y la fuerza debe ser concentrada. La respiración debe ser continua, sin retenciones. Los movimientos se suceden rítmicamente, sin pausa, siendo fluidos y flexibles.
Cuando el cuerpo y los movimientos eran rígidos y la fuerza estaba muy dispersada, la técnica parecía fuerte. Actualmente es sólo el ejecutor quien siente que sus golpes son efectivos.
Cada movimiento tiene su propio valor, como y porqué es efectivo y debe practicarse en consecuencia.
Los puntos esenciales:
• aplicación de fuerza suave pero enérgica
• expansión y contracción del cuerpo
• movimiento rápido o suave según las técnicas
Puntos en común, ritmo, sentido de la oportunidad, distancia, respiración, flujo de la energía vital.
No hay que usar la fuerza indiscriminadamente, y tampoco la rapidez tiene un valor en sí misma.“
El kata forma parte inseparable e importantísima dentro del Karate Do.
El trabajo y la progresión en los katas podremos enfocarlo de la siguiente forma:
1º. Corrección en los movimientos, desplazamientos y de la técnica.
2º. Precisión y terminación de todas sus partes.
3º. Búsqueda de la continuidad de movimientos sin interrupciones dentro de la lógica de su aplicación real. Todo ello ejecutado con fluidez y naturalidad.
4º. Todo lo anterior deberá poderse ejecutar con velocidad sin mermar su corrección ni precisión.
5º. Vivencia .Llegamos así a una ejecución cercana a la aplicación real, punto esencial para imprimir al kata de eficacia en combate.
6º. Una vez logrado todo esto, formaremos parte del kata. La técnica y la precisión serán sustituidas por el sentimiento y el corazón (kimochi y kokoro), y la verdadera importancia de su eficacia será la del combate contra nosotros mismos.
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